En lo más profundo de la sierra de Madrid (España), en la década de 1960, existía un pequeño pueblo tranquilo y pacífico donde prácticamente todos los habitantes se conocían entre sí y vivían en armonía con la naturaleza. Sus casas se encontraban esparcidas a lo largo de una vasta superficie de frondosa vegetación y, a una de esas casas, nadie se atrevía a acercarse.
Era una vieja y abandonada mansión, rodeada de un oscuro y tenebroso jardín.
Con el tiempo, aquella mansión se la conoció localmente como la «casa del terror«.
Incendio misterioso
La historia decía que una familia rica y poderosa había vivido allí hace muchos años, pero una noche, un incendio inexplicable destruyó la casa, dejando sin vida a todos los miembros de la familia.
Desde entonces nadie se atrevió a acercarse a la mansión, ya que se decía que estaba maldita.
Al poco tiempo, un joven y curioso aventurero que respondía a las iniciales de E.R., decidió investigar la historia de la mansión.

Un descubrimiento inquietante
El joven se adentró en el bosque y encontró la casa, pero algo extraño sucedió. A medida que se acercaba, el viento comenzó a soplar con fuerza y las ramas de los árboles se movían como si algo las estuviera empujando. El joven se sintió atraído por una fuerza inexplicable hacia la casa, como si algo o alguien lo estuviera llamando.
Finalmente llegó a la mansión y entró. Pero lo que encontró dentro le dejó petrificado. La casa estaba en ruinas, con las paredes cubiertas de hiedra y las ventanas rotas. Sin embargo, había una habitación en el segundo piso que estaba intacta.
El joven decidió entrar a la habitación y quedó horrorizado. La habitación estaba perfectamente limpia y ordenada, llena de cuadros de la familia que había vivido allí, pero en cada uno de ellos, los miembros de la familia tenían una expresión aterradora en sus rostros, como si algo terrible hubiera sucedido.
Una maldición
El joven intentó salir corriendo, sin embargo algo le detuvo. Era como si algo o alguien le estuviera sujetando.
Seguidamente escuchó una voz en su cabeza, una voz que le hablaba de un terrible secreto, de una terrible maldición que había caído sobre la familia y que estaba esperando para atrapar a su próxima víctima. El joven intentó huir, pero era demasiado tarde. No se sabe por qué, pero se cree que nunca llegó a salir de la casa. Se dice que la maldición le atrapó y le convirtió en parte de ella.
Y es que nadie volvió a ver al joven nunca más por el pueblo y su desaparición fue un misterio para todos. Incluso los habitantes del pueblo comenzaron a evitar la mansión y a contar historias aterradoras sobre ella para alejar a los curiosos.
Con el tiempo, la mansión se convirtió en un lugar prohibido y nadie se atrevió a acercarse durante casi una década.
Los años pasaron y la mansión se convirtió en una leyenda, un lugar donde el miedo y la maldición aún sobrevivían.
Pero había algo más, un secreto aún más aterrador, un secreto que solo los valientes y los curiosos podrían descubrir si se atrevían a entrar en la mansión maldita y enfrentar sus terrores.
Investigadores paranormales
Con el tiempo, un grupo de investigadores paranormales decidió investigar la mansión. Armados con cámaras de vigilancia y grabadoras, se adentraron en la mansión una fría noche. Lo que encontraron allí les dejó sin aliento.
En la mansión encontraron pruebas de actividad paranormal, como objetos moviéndose por sí solos, voces extrañas y sombras inquietantes.

Diario y rituales
También descubrieron un antiguo diario escrito por el patriarca de la familia que revelaba un terrible secreto. A partir del diario se supo que la familia había practicado rituales oscuros y sacrificios humanos en un intento de conseguir riquezas y poder eterno.
Como resultado, habían atraído una entidad maligna que había consumido sus almas y había maldecido la casa para siempre.
Ante eventos que aún no se explican y que comenzaron a suceder tras leer el diario, los investigadores decidieron abandonar la mansión antes de que la entidad maligna los atrapara a ellos también.
Desde entonces, son muchos los rumores sobre voces extrañas que se dicen escuchar en la noche en la mansión. Incluso algunas personas aseguran haber visto sombras y figuras extrañas en las ventanas de la mansión, como si los espíritus de la familia aún estuvieran atrapados allí, esperando a ser liberados de su maldición eterna.
La mansión sigue allí, toda en ruinas excepto la habitación de los cuadros, escondida en la sierra madrileña, en las profundidades del bosque, esperando a su próxima víctima.