Solían hacer una de las cervezas más queridas en Alemania, pero hoy en día está abandonada. La fábrica de cerveza Bärenquell, conocida por primera vez como Borrusia, fue fundada en 1882 en el distrito berlinés de Treptow-Köpenick.
En 1898 la compañía fue comprada por la cervecera Schultheiss-Brauerei, que la expandió, agregando más edificios y equipos. Solo dos de los edificios originales permanecen en la actualidad: la residencia oficial y el edificio administrativo, construido en estilo neorrenacentista.
Después de la Segunda Guerra Mundial, la fábrica se nacionalizó y se convirtió en parte de Volkseigener Betrieb, una gran corporación de propiedad pública de Alemania Oriental. Los tiempos más difíciles llegaron cuando Bärenquell se privatizó, después de la caída del Muro de Berlín. Alemania Oriental dio la espalda a sus productos locales en favor de lo que Occidente tenía para ofrecer. Las cervezas orientales ya no podían competir con las modernas bebidas disponibles en el oeste. Ese fue el momento en que muchas cervecerías cerraron y Bärenquell y su gran fábrica fue una de ellas, echando el cierre a sus puertas en 1994.
A pesar de que varios de sus edificios han sido catalogados como protegidos desde hace décadas, la fábrica de Bärenquell se ha deteriorado y ha sido fuertemente saqueada y vandalizada a lo largo de los años. Alrededor de 2013, varios edificios fueron eliminados de la lista de protección para ser demolidos y dar paso a una gran remodelación. Sin embargo, todavía no se ha tomado ninguna medida.