Tras la invasión turca de Chipre (Operación Atila) en 1974, la Fuerza de las Naciones Unidas para el Mantenimiento de la Paz estableció una zona de amortiguación entre la República de Chipre y la recién creada República Turca del Norte de Chipre. La «Línea Verde» (Buffer Zone), como también se llama a la zona desmilitarizada, se extendió más de 180 kilómetros (112 millas), dividiendo la isla de Chipre en dos. El ancho de la zona varía de 3,3 metros (11 pies) a 7,4 kilómetros (4,6 millas).
Hoy en día todavía hay miles de personas que viven en varios de sus pueblos o trabajan en tierras agrícolas que se encuentran dentro de la zona. Sin embargo, en la parte de la zona que cruza la ciudad de Nicosia, la situación es diferente. Esta zona contiene todavía muchas de las casas y negocios que fueron abandonados en 1974, así como el Aeropuerto Internacional de Nicosia, que no ha recibido vuelos desde 1977.
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