Koga Family Land, en la prefectura de Shiga, tiene la reputación de ser uno de los lugares abandonados más impresionantes de Japón. Aunque en realidad, es más correcto decir que tenía esa reputación, ya que después de más de 20 años de decadencia, este lugar una vez tan extrañamente hermoso, fue demolido y destruido hacia finales de 2008.
Hay afirmaciones de que los propietarios estaban preocupados sobre los peligros para las personas que visitaban sin permiso el lugar, sin embargo, también se dice que estaban cansados de lidiar con los golfistas que caminan por su propiedad privada a lo largo de una calle por la que pasan varios hoyos.
Los pocos restos supervivientes de Koga Family Land están ubicados en la parte sur de un club de golf rodeado de montañas. A día de hoy, el parque se reduce a pequeños montones de basura (uno con un asiento de noria) y un confuso laberinto de caminos. No hay carteles, ni edificios, ni atracciones. Únicamente la naturaleza recuperando un área que una vez fue un parque de atracciones de gran popularidad. Lo poco que se puede encontrar en pie son los restos de dos edificios que se hicieron de cemento, lo que parece que fue demasiado caro derribar y allí permanecieron.
La primera de esas deterioradas estructuras de cemento fue una tienda de recuerdos, de la cual las listas de precios todavía se puede ver en la pared. El segundo edificio parece ser un restaurante con un gran comedor/sala de eventos en el primer piso y un extenso segundo piso, que incluye una cocina, todo tipo de muebles, mantas podridas y cuadros pintados por niños.
Quitando los restos de cemento de los dos edificios y la basura entre las espesa vegetación, nada queda de aquel Koga Family Land que a tantas tardes de diversión ofreció a las familias japonesas.